La discriminaban por su nacionalidad y la maltrataban físicamente

Resulta muy triste cuando a partir de fallos como este, encontramos la existencia de prácticas laborales vergonzosas.

Aquí la justicia encontró probado un acoso laboral y psicológico grave por parte de la supervisora de un local de ropa, que dio lugar a un despido indirecto invocado por la trabajadora y reconocido legítimo por la justicia.

La Sala III de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo de Capital Federal estableció que “De la prueba testimonial aportada por la accionante, quedó acreditado el acoso laboral y psicológico infligido por parte de la supervisora, pues los testigos fueron contestes en describir el hostigamiento, los insultos y malos tratos sufridos por la trabajadora por su nacionalidad (paraguaya), coincidente con lo denunciado en la demanda, además, agregaron que era una persona sumisa y que dejó de trabajar por un hecho violento (fue zamarreada siendo sujetada desde los hombros). Resulta ajustada a derecho la solución arribada por la sentenciante de grado que estimó justificado el despido indirecto ya que el acoso moral sufrido por la trabajadora provocó una continua y creciente aflicción, con la finalidad de hacer insostenible la continuidad de la relación laboral.”

M., R. S. vs. Levi’s s. Despido /// CNTrab. Sala III; 11/07/2018;